El entorno económico para el sector pesquero industrial continua en condiciones adversas luego de dos años consecutivos de caída de precios y desaceleración de la demanda en el mercado internacional, situación agravada ante un dólar fortalecido que merma la competitividad de una industria predominantemente exportadora.
En el 2015, a pesar de que todas las industrias exportadoras enfrentaron alguna afectación, en el caso de la industria pesquera fue de mayores proporciones. El valor acumulado de exportaciones de preparaciones y conservas de atún, sardina y harina de pescado hasta septiembre de 2015 en conjunto decreció 24% respecto al año anterior, mientras que las exportaciones no petroleras registraron una contracción de apenas el 6%.
En este escenario, el incremento del costo del combustible (bunker) para el sector industrial, según la reforma al reglamento sustitutivo para la regulación de los precios de los derivados de los hidrocarburos establecida mediante Decreto Ejecutivo Nro. 799 del 15 de octubre de 2015, representa para la industria pesquera, un significativo incremento de costos. La industria pesquera está consciente de los objetivos nacionales detrás la reforma a la política pública de fijación de precios de los combustibles; no obstante, ante una de las coyunturas económicas más desfavorables de los últimos 10 años en el mercado internacional, el incremento de precios al combustible (bunker) a la industria pesquera que exporta el 80% de su producción representa una importante afectación en términos de competitividad.
Con los nuevos precios de combustibles para el sector industrial fijados por Petroecuador EP para el mes de noviembre del 2015, los efectos son:
- En la industria de harina de pescado, con los nuevos precios, el costo del combustible en relación al costo de producción representa un 8,04%. Antes de la reforma, el rubro representaba apenas el 3,1%. En valores nominales, el costo anual adicional para la industria procesadora de harina de pescado sería de aproximadamente $ 7,4 millones de dólares (sin incluir costos de transporte).
- En la industria de preparaciones y conservas de pescado, con los nuevos precios, el costo del combustible representa aproximadamente el 1,3% del costo total. Antes de la reforma, el rubro representaba apenas el 0,6%. En términos nominales, el costo anual adicional para la industria sería de aproximadamente $ 12,42 millones de dólares (sin incluir costos de transporte).
El siguiente cuadro presenta una estimación sectorial del consumo de bunker en ambas industrias, así como una estimación de incremento del costo según el nuevo precio en terminal fijado por Petroecuador EP.
Según estas estimaciones, el costo adicional para la industria pesquera podría superar los $20 millones de dólares anuales.
Los precios han caído significativamente, sobre todo en productos como las preparaciones y conservas de atún que representan más del 80% de las exportaciones pesqueras (sin incluir camarón), el valor FOB promedio de exportación ha caído en promedio un 21% en el 2015, resultando en menores márgenes para hacer frente a crecientes costos que la industria no puede traspasar a sus clientes en el extranjero, en tanto que son productos que se manejan como commodities. Además de la presencia de producción asiática y latinoamericana más competitiva en precios, entre otros por tipo de cambio dada la coyuntura actual del dólar.
Las siguientes cifras resumen la difícil situación que enfrenta la industria pesquera en el sector externo:
- Las exportaciones de atún (lomos y conservas) totalizaron hasta septiembre de 2015 un total de $628 millones, un valor 29% inferior al registrado en similar periodo del 2014. La afectación de las ventas también ha sido en términos reales, con una caída interanual del volumen exportado de las exportaciones de la subpartida 160414 del 13% interanual hasta septiembre del 2015. Las menores ventas han sido generalizadas en todos los mercados tradicionales de exportación (a excepción de los Estados Unidos), registrándose importantes pérdidas de mercado en países como Chile, Perú y otros destinos de Unión Europea principalmente.
- Las exportaciones de conservas de sardina también decrecieron en 2015, las cifras hasta septiembre reflejan un decrecimiento del valor exportado del 5% respecto al año 2014, totalizando $ 57,69 millones.
- Particularmente, la industria de harina de pescado mostró en el primer trimestre del 2015 una situación anómala a la tendencia de los últimos años, con un importante incremento del precio internacional, a consecuencia de la escasez de anchoveta en la industria peruana, principal productor en el mundo. Sin embargo, dicha situación se fue disipando en el transcurso del segundo y tercer trimestre, con tendencia de precios a la baja.
En el caso de la industria atunera, las cuestiones relacionadas a competitividad son críticas en escenarios de bajos precios, según concluye el “Estudio de Competitividad del Subsector Atunero Ecuatoriano: Benchmarking con la industria atunera de Tailandia” presentado por el MCE y CORPEI (2015), el cual demuestra el importante diferencial de competitividad entre la conserva de atún del Ecuador y la producción asiática, tomando como referencia a Tailandia como principal competidor. El estudio en mención también recomienda mantener el precio de los combustibles en el sector atunero, como una medida para evitar incrementar en detrimento los diferenciales de competitividad respecto a la producción asiática.
La política pública diferenciada para mantener el precio del diésel al sector pesquero primario establecida en el D.E. 799, es un trascendental apoyo del Estado a los armadores de la flota nacional, siendo estos el primer eslabón dentro de las cadenas de valor de la industria pesquera. No obstante, el efecto de la medida será mermado cuando los procesadores y exportadores de esa materia prima enfrenten las actuales afectaciones de competitividad en el mercado externo en una coyuntura de apreciación del dólar, sumado a los problemas de liquidez para capital operacional que enfrenta el sector.
Por los motivos expuestos, solicitamos se considere la revisión de una política pública integral en la fijación de precios de los combustibles para el sector pesquero exportador, considerando las afectaciones y actuales condiciones de competitividad en el mercado internacional.
Otros datos de interés
- Las exportaciones acumuladas a septiembre de 2015 de atún procesado, harina de pescado y sardinas, productos con valor agregado, aportaron con el 9% de las exportaciones no petroleras, cifra que alcanzó el 11% en el 2014.
- Las plantas industriales para la producción de harina de pescado emplean directamente a 950 personas, según datos del Censo 2015 realizado por la Cámara Nacional de Pesquería; mientras que, en la industria de preparaciones y conservas de pescado se emplearon 26.410 empleos, según cifras de las Cuentas Nacionales del Banco Central del Ecuador para el año 2014.