Con el crecimiento de la demanda por atún una preocupación continúa creciendo dentro de la industria, que aumentar el volumen de las capturas para responder a esta demanda simplemente no es sostenible a largo plazo.
En la conferencia de Bangkok sobre el atún este año, se mostraron estadísticas que sugieren que mientras en el Pacífico las capturas se han mantenido estables, en el resto del mundo han ido en un peligroso aumento. Sólo de 2012 a 2014 las capturas se han incrementado en estas áreas un 13%.
En este mismo sentido la Comisión Interamericana del Atún Tropical (CIAT) también tuvo dificultades para establecer medidas claras para la gestión del atún tropical y la conservación del atún de aleta azul.
Muchos expertos científicos han recomendado que el cierre de la pesca de bigeye y aleta amarilla debe extenderse a 82 días, a fin de garantizar la sostenibilidad en respuesta al reciente aumento de la capacidad de la flota. La delegación de Ecuador fue más allá y señaló en la misma reunión de la CIAT en California, que debía buscarse la veda de la pesca de atún a nivel mundial.
Se adoptaron nuevas medidas también para la evaluación de poblaciones y recolección de datos para la conservación de diferentes especies de tiburón, con procedimientos de liberación de seguridad para todos los tiburones no retenidos y una prohibición general de las líneas de tiburón.
Se adoptó la propuesta de la UE sobre la pesca con Dispositivos de Concentración de Peces, que tendrá como objetivo permitir que se avance en la recopilación de datos, la investigación y la gestión de los DCP.
Muchas de las decisiones más difíciles de esta reunión fueron diferidas a la Comisión de Pesquerías del Pacífico Central. Por otra parte se avanzó en la conservación de tiburones y en pesca con dispositivos DCP. Además la UE se comprometió a adoptar medidas con el asesoramiento científico. Estos temas se espera que sean reanudados en octubre, en otra reunión de la Comisión.