Por: Franklin Ormaza González, PhD. Cámara Nacional Pesquería.
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Las condiciones oceanográficas en el Océano Pacífico Central Ecuatorial donde se encuentra las regiones Niño 4, 3.4, 3 y 1+2, demuestran que las anomalías térmicas en la superficie y la columna de agua han estado decreciendo paulatinamente, pero todavía se mantiene el status de La Niña, ya que estas se han mantenido en el periodo Julio a Diciembre en -0.8C. http://www.cpc.ncep.noaa.gov/products/analysis_monitoring/lanina/enso_evolution-status-fcsts-web.pdf). La Figura 1 muestra las distribución de anomalías de temperatura superficial del mar (TSM) desde Octubre hasta Diciembre 2016, se observa que practicamente todo el Océano Pacífico se encontró con anomalías negativas de hasta -1.5 C alrededor de la línea ecuatorial (areas El Niño 4, 3.4, 3, 1+2) y en el hemisferio norte, otra parte registra estado neutro (-0.5 a 0.5 C), y anomalías positivas hacia latitudes altas. Sin embargo, cabe anotar la extensa área del Océano Pacifico Norte que registró durante tres meses anomalías negativas que se reflejan en el Pacifico Decadal Oscillation (Ver Mantua et al., 1997), un promedio de -0.87 C y un mínimo de -1.06 C, corroborando que el PDO se encuentra en fase fría.
Fig. 1. Distribución de TSM en el Océano Pacífico. https://www.climate.gov/sites/default/files/SST-Anomaly-OND2016_1240.png
En las aguas costeras del Ecuador (Niño1+2) en la segunda semana de Enero, las TSMs predominantes son 25-26 C, con anomalías positivas muy cerca de la costa; pero en Galápagos (Fig. 2) las TSM varían de 22-25, pero con anomalías negativas de hasta -1C. Estas características térmicas se han mantenido desde finales de Diciembre 2016. Probablemente las isotermas lleguen a valores típicos (hasta 26-27C) para la estación Enero-Abril; este rango es prácticamente ideal para los procesos biológicos de peces demersales y pelágicos.
Fig. 2. TSM y anomalías térmicas en Niño 1+2. Fuente: http://www.inocar.mil.ec/img/TSM/TSM/TSM_20170109_20170115.jpg
Las proyecciones de modelos indican que La Niña 2016 se extendería hasta Febrero (Fig. 2), de ahí el Océano Pacífico entraría a un estado neutro con anomalías térmicas de -0.5 a +0.5 C durante todo el 2017, con probabilidades de superar +0.5C en algún momento después de junio. Los modelos se complican o se vuelven menos exactos y precisos al extenderse el tiempo después del último registro, lo que se puede observar en la Fig. 3 (11 Enero 2017). En la zona costera ecuatoriana (Niñ0 1+2), las anomalías positivas han estado presente desde mediados del 2016 pero con significativa variabilidad alrededor de 0.0 C; las proyecciones hasta marzo indican que llegarían a promediar alrededor de 1.5C, lo que provocaría una TSM promedio de 26.5 C (asumiendo una referencia de 25C. Al llegar al final del 2017 se proyectan un amplio rango de anomalías que implicaría un Niño o la continuación del estado neutro. Sin embargo, se debe recordar que la Niña generalmente es interanual (se extiende por más de 20 meses), por ejemplo la Niña 2005-2006 (http://ds.data.jma.go.jp/gmd/tcc/tcc/news/tccnews05.pdf) o 2010-2011 (http://www.bom.gov.au/climate/enso/history/ln-2010-12/), por lo que no sería sorpresa que el evento 2016 se extienda a 2017.
Fig. 3. Modelaje predictivo de las anomalías térmicas en Niño 3.4 (izquierda) y 1+2 (derecha). Fuente: http://www.metoffice.gov.uk/research/climate/seasonal-to-decadal/gpc-outlooks/el-nino-la-nina
Las stocks pesqueros se tienden a recuperar durante y después La Niña, ya que durante este evento las corrientes frías de Humbolt y Cromwell ( Cromwell,1953) tienden a emerger (surgencia o “upwelling”) a la superficie con mucha fuerza y altos volumenes de agua; esto es a alrededor de 42 Sv (1 Sv igual a un millón de metros cúbicos por segundo): 30 Sv de Cromwell y 12 Sv de Humbolt. Estos cuerpos de aguas son ricos en nutrientes (N, P, Si, etc.), los cuales en conjunto con la radiación solar en la superficie dan paso a los procesos fotosintéticos. Las surgencias ocurren al frente del Golfo de Guayaquil (82-83 W) hasta Manabí (Isla de La Plata) y al Oeste de Galápagos. Los procesos de producción (fotosinteses) se reflejan en los niveles tróficos superiores a los 6-18 meses (dependiendo la especie); se podría esperar que algunas de ellas estén en mayor numero de individuos, y estos a su vez de mayor tamaño a lo usual. Por comentarios de pescadores, se sabe que el Scomber japonicus (Morenillo) está siendo capturado con relativamente tamaños por encima de lo regular; mientras que sardina (Opisthonema sp) ha sido registrada y capturada en la playas de Anconcito al Sur de Ecuador (Foto 1) en la tercera semana de Enero del 2017; los ejemplares capturados pueden ser clasificados como juveniles. Estos juveniles si no fuesen capturados (de manera ilegal), meses más tarde serían adultos-reproductores. Otra especie como el atún barrilete (Katsuwunnus pelamis), aleta amarilla (Thunnus albacares) y patudo (Thunnus obesus) también tomaran varios meses antes de ser adultos. Siendo así, probablemente en el primer trimestre del 2017 se podrán tener capturas de peces adultos. Los peces demersales igualmente aumentarán en tamaño y volumen.
Foto 1. Sardina capturada por la flota artesanal en las playas del Sur del Ecuador. Cortesia de NN (2017).
Otro de los impactos de La Niña, es la escasez de lluvia en el perfil costero del Ecuador, debido a la presencia de vientos Sur-Suroeste que trasladan el vapor de agua y mantienen la Zona de Convergencia Intertropical al norte (alrededor 5-8 N), y por otro lado las temperaturas actuales del océano no permiten suficiente evaporación. Las sequías en el Ecuador son típicas durante este evento frío. Actualmente el sur de la costa ecuatoriana está atravezando por una sequía desde mediados del 2016 (http://expreso.ec/economia/la-carencia-de-lluvias-seguira-golpeando-al-agro-YM916045) , de manera particual Manabí y los Ríos. En el mes de Enero se da el inicio de las lluvia en la costa ecuatoriana, a la tercera semana del mes, se registra volumenes de lluvia por debajo del promedio (Fig. 4). En las 7 estaciones que tiene el INOCAR. Manta y Puerto Bolívar tienen practicamente 0.0 mm de lluvia, mientras que Esmeraldas y San Lorenzo, casi llegan al 100% del promedio, en tanto que Guayaquil registra 40% y La Libertad casi el 20% de lo típico. Es plausible pensar que las lluvias estarán por debajo del promedio en este primer trimestre del 2017.
Fig. 4. Precipitación en la costa ecuatoriana. Fuente: INOCAR (http://www.inocar.mil.ec/web/index.php/precipitacion-por-estacion)
Referencias
Cromwell, Townsend (1953). «Circulation in a meridional plane in the central equatorial Pacific.» Journal of Marine Research 12 196-213
Mantua, N.J. and S.R. Hare, Y. Zhang, J.M. Wallace, and R.C. Francis, 1997: A Pacific interdecadal climate oscillation with impacts on salmon production. Bulletin of the American Meteorological Society, 78, pp. 1069-1079. http://www.atmos.washington.edu/~mantua/abst.PDO.html)
